El arranque paupérrimo en juego y la escasa cosecha de puntos -5 sobre 15 puntos posibles en el campeonato plantea en el presente de River una coyuntura impensada poco tiempo atrás, que es la continuidad del entrenador millonario Leonardo Astrada.
El "Jefe" fue consultado acerca de esta posibilidad y respondió que se encontraba con más fuerza que nunca para cambiar de raíz el magro momento que padece el equipo.
Haciendo a un costado las reservas anímicas del entrenador y la incapacidad del equipo para resolver los partidos en su favor, en River se sabe que existen críticas al actual proceso de Astrada.
En los reconocimientos al director técnico constan el buen manejo de los humores de un plantel con algunos miembros nada fáciles de llevar pero así también hay un disconformismo de tono leve y moderado en relación a los planteos livianos de el entrenador, sin determinación para ganar los encuentros.
Todo será negado, pero lo cierto es que en River tienen un plan B de emergencia por si Astrada renunciara y en ese caso el hombre que lo reemplazaría sería quien hoy conduce las inferiores del club, Juan José López.
Pensando en un futuro post mundial el otro nombre que ha vuelto ha sonar es el de Ramón Díaz una figura que de buena parte a este tiempo siempre revolotea como posible entrenador.
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