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sábado, 9 de enero de 2010

La imposible misión de comprar un goleador

La ausencia de un goleador es el desvelo de Astrada y los dirigentes de River, y aun no tiene solución.

Es la tarea más difícil en un mercado deprimido en dinero fresco y jugadores libres con posibilidades de sumarse a este River de la era Daniel Passarella.
Cvitanich, Boghossian, Figueroa fueron los ilustres apellidos que sonaron al principio y que muy rápido fueron descartados por sus altos contratos inaccesibles para los agujereados bolsillos de la institución.
Los hombres de gol que han sonado en los últimos días son los de Jackson Martínez, Ernesto Farías y Santiago Silva.
La sensanción cierta es que el arribo de alguno de estos tres goleadores a River es de bajas posibilidades.
Jackson Martínez de Independiente Medellín de Colombia ha coqueteado con muchos clubes de la Argentina (Estudiantes, San Lorenzo, Racing) y a esta altura su conducta parece más una jugada para incrementar su cotización que la real intención de jugar en el fútbol argentino.
La oferta de 2.700.000 dolares que River hizo a través de un grupo inversor es insuficiente para el colombiano, hoy muy cerca de pasar a Jaguares de Chiapas de México.
River preguntó también por Ernesto Farías quien ya supo vestir la camiseta de la banda roja durante los años 2005, 2006 y 2007 anotando una aceptable cantidad de goles.
Es cierto que nunca logró enamorar al hincha y aun más lejos estuvo de lograr alguna clase de idolatría con la gente, pero a la luz de lo que vino luego del "Tecla", hoy sería bienvenido por Nuñez.
Difícil porque Farías tiene contrato y muy bueno con el Porto y volvería a ser titular en su equipo.
El eslabón final del tortuoso camino de River por conseguir alguien que haga goles concluye con el sondeo por Santiago Silva, goleador de Banfield actual campeón de la liga argentina.
El punto final a la pelea entre el uruguayo y el "Taladro" le posibilita al jugador buscar nuevo rumbo para su carrera.
Entre los posibles destinos apareció River como lugar para que el "Pelado" aterrice con sus goles.
El gran inconveniente es que no es River quien pagaría por los servicios del delantero sino un "Grupo Inversor" y en sus preferencias no aparece Santiago Silva, por su edad (30) lo que disminuye su capacidad de reventa.
Misión Imposible para River la de sumar alguien que sepa hacer lo más bello del fútbol: un gol.

Enlaces relacionados: Farías, Martínez.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sin plata es imposible comprar un jugador y menos un goleador.
La vamos a tener jodida otra vez este campoenato