River Plate perdió este sábado 2 a 1 ante Boca Juniors , en el primer superclásico del año, correspondiente al torneo pentagonal de verano, El millo tuvo todo servido para ganar pero que, como viene sucediendo, sucumbió otra vez por su propia impotencia.
El partido se jugó ante una multitud en el estadio mundialista José María Minella, de la ciudad de Mar del Plata, con un buen arbitraje de Héctor Baldassi, quien expulsó en forma correcta a los capitanes de ambos equipos, Sebastián Battaglia y Paulo Ferrari.
River salió a jugar con dos líneas de cuatro pese a que se anunciaba a Diego Buonanotte como enganche. Sin embargo, el "enano" se recostó sobre la izquierda y en la etapa inicial nunca pesó en el partido.
Recién a los 24 minutos llegó la situación más clara de gol, hasta ese momento, producto de un desborde por derecha de Mauro Rosales, quien envió un centro llovido que conectó de cabeza entrando por el segundo palo Radamel Falcao, pero salvó el arquero Josué Ayala, espectador de lujo durante gran parte de la etapa inicial.
Hasta ese momento River parecía dormido, pero después de esa acción comenzó a tener otra actitud, se adelantó en el campo y minutos después de esa chance Paulo Ferrari, con un remate cruzado desde fuera del área casi abre el marcador.
Esos fueron dos mensajes, pero River siguió yendo hasta que a los 31 minutos se fue expulsado Battaglia, el mejor del conjunto de la ribera, por una falta a Falcao, y 60 segundos después llegó la apertura del marcador, con un cabezazo de Cabral, quien aprovechó una serie de rebotes en el segundo palo.
La hermosa noche en Mar del Plata se le comenzaba a complicar a Boca, por la salida de Battaglia, bien expulsado por Baldassi, y el 0-1 abajo, pero el fútbol no es una ciencia exacta y cuando parecía que si River se lo proponía liquidaba el pleito llegó la igualdad marcada por Dátolo, luego de un remate cruzado de Gracián.
El partido se jugó ante una multitud en el estadio mundialista José María Minella, de la ciudad de Mar del Plata, con un buen arbitraje de Héctor Baldassi, quien expulsó en forma correcta a los capitanes de ambos equipos, Sebastián Battaglia y Paulo Ferrari.
River salió a jugar con dos líneas de cuatro pese a que se anunciaba a Diego Buonanotte como enganche. Sin embargo, el "enano" se recostó sobre la izquierda y en la etapa inicial nunca pesó en el partido.
Recién a los 24 minutos llegó la situación más clara de gol, hasta ese momento, producto de un desborde por derecha de Mauro Rosales, quien envió un centro llovido que conectó de cabeza entrando por el segundo palo Radamel Falcao, pero salvó el arquero Josué Ayala, espectador de lujo durante gran parte de la etapa inicial.
Hasta ese momento River parecía dormido, pero después de esa acción comenzó a tener otra actitud, se adelantó en el campo y minutos después de esa chance Paulo Ferrari, con un remate cruzado desde fuera del área casi abre el marcador.
Esos fueron dos mensajes, pero River siguió yendo hasta que a los 31 minutos se fue expulsado Battaglia, el mejor del conjunto de la ribera, por una falta a Falcao, y 60 segundos después llegó la apertura del marcador, con un cabezazo de Cabral, quien aprovechó una serie de rebotes en el segundo palo.
La hermosa noche en Mar del Plata se le comenzaba a complicar a Boca, por la salida de Battaglia, bien expulsado por Baldassi, y el 0-1 abajo, pero el fútbol no es una ciencia exacta y cuando parecía que si River se lo proponía liquidaba el pleito llegó la igualdad marcada por Dátolo, luego de un remate cruzado de Gracián.
Gorosito se dio cuenta a los 33 minutos del segundo tiempo que su equipo tenía un jugador de más y sacó un defensor, Cristian Villagra, para que entre un delantero, Santiago Salcedo, pero fue muy tarde.
Boca, con uno menos, fue por más, desbordó Ricardo Noir por izquierda, Abelairas le cometió penal, Baldassi lo sancionó y Dátolo lo cambió por gol.
Boca, con uno menos, fue por más, desbordó Ricardo Noir por izquierda, Abelairas le cometió penal, Baldassi lo sancionó y Dátolo lo cambió por gol.
La gente milllonaria se fue triste por culpa de un timorato River.
No hay comentarios:
Publicar un comentario