El 29 de junio de 2003, River obtuvo su título número 31 ante un rival de poca historia en Primera, que jugaba en el Sur de la provincia de Buenos Aires y cuyos colores traían a la memoria a un taxi de los miles que andan por la ciudad porteña cualquier día de éstos. ¿Adivinó el equipo? Sí, Olimpo, el mismo rival del próximo domingo. Aquella vez fue en Bahía, esta vez será en Núñez. ¿Tendrá el mismo final feliz?
Para aquéllos que gustan de las cábalas hay que agregar que River se consagró campeón gracias a un resultado de... Estudiantes de La Plata. El “Pincha” derrotó al escolta millonario en ese torneo, Vélez Sársfield, por 1-0 en Liniers. Está vez el resultado debería ser adverso para el equipo Pincharrata para que River pueda gritar campeón.
El equipo del ingeniero Manuel Pellegrini llegó a Bahía con dos victorias tremendas en el bolso. Un 4-3 ante Lanús en el Sur y un 3-0 ante el “Lobo” en casa. Llegó a la fecha 18 para seguir arriba, esperando desatar el festejo grande una semana después ante Racing (con quien perdería 3-1), pero la victoria del “Pincha” precipitó el final y River se consagró campeón por trigésima primera vez en su historia. Por aquellos días los nubarrones que acosaron Núñez en estos cuatro años ni habían aparecido por el horizonte.
Ojo, el partido costó mucho, hasta que a los 35 del complemento, Víctor Zapata clavó un zurdazo memorable y se llevó una porción de la gloria. Cerca del final, Diego Armando Barrado (hoy jugador de Olimpo, aunque debe retornar a River en junio) selló el 2-0 que desató la locura en un plantel que estaba afectado por el secuestro del padre del “Negro” Astrada, quien finalmente fue liberado semanas más tarde.
¿Se repetirá la historia? ¿En lugar de Zapata será Abelairas? ¿En lugar de Barrado será Buonanotte? ¿River será otra vez campeón ante el equipo bahiense? Tienen que darse muchos resultados pero, primero que nada, que River gane. Aunque este antecedente da fuerzas para creer. Ojalá se dé un River campeón este domingo y sino el fin de semana que viene. No importa. Lo que importa es volver a gritar "Dale campeón".
Para aquéllos que gustan de las cábalas hay que agregar que River se consagró campeón gracias a un resultado de... Estudiantes de La Plata. El “Pincha” derrotó al escolta millonario en ese torneo, Vélez Sársfield, por 1-0 en Liniers. Está vez el resultado debería ser adverso para el equipo Pincharrata para que River pueda gritar campeón.
El equipo del ingeniero Manuel Pellegrini llegó a Bahía con dos victorias tremendas en el bolso. Un 4-3 ante Lanús en el Sur y un 3-0 ante el “Lobo” en casa. Llegó a la fecha 18 para seguir arriba, esperando desatar el festejo grande una semana después ante Racing (con quien perdería 3-1), pero la victoria del “Pincha” precipitó el final y River se consagró campeón por trigésima primera vez en su historia. Por aquellos días los nubarrones que acosaron Núñez en estos cuatro años ni habían aparecido por el horizonte.
Ojo, el partido costó mucho, hasta que a los 35 del complemento, Víctor Zapata clavó un zurdazo memorable y se llevó una porción de la gloria. Cerca del final, Diego Armando Barrado (hoy jugador de Olimpo, aunque debe retornar a River en junio) selló el 2-0 que desató la locura en un plantel que estaba afectado por el secuestro del padre del “Negro” Astrada, quien finalmente fue liberado semanas más tarde.
¿Se repetirá la historia? ¿En lugar de Zapata será Abelairas? ¿En lugar de Barrado será Buonanotte? ¿River será otra vez campeón ante el equipo bahiense? Tienen que darse muchos resultados pero, primero que nada, que River gane. Aunque este antecedente da fuerzas para creer. Ojalá se dé un River campeón este domingo y sino el fin de semana que viene. No importa. Lo que importa es volver a gritar "Dale campeón".
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