Se fue. Aunque hasta último momento su sueño fue convencer a Diego Simeone de que podía ser el volante central de River, Nicolás Domingo viajó anoche hacia Italia para incorporarse al Genoa. Y lo hizo con la ilusión de volver, claro, ya que la transferencia se firmó a préstamo por un año, sin cargo, pero con una opción de compra de 1.800.000 euros.
Surgido de las Inferiores de River, Domingo fue subiendo categoría a categoría hasta llegar a Primera, en donde jugó 30 partidos y se dio el gusto de convertir un gol: a Gimnasia de Jujuy, el 17 de septiembre del 2006, por el Apertura de aquel año. Sin embargo, a pesar de la confianza que en su momento le brindó Daniel Passarella, con Diego Simeone no logró la continuidad necesaria como para ganarse una lugar y decidió partir. Pudo haber sido al Atlas de México, pero a River la operación no le cerró. Hasta que apareció el Genoa y Domingo hizo las valijas y ayer a la noche viajó para sumarse a su nuevo club.
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